Entre la cultura gastronómica que se extiende por la república mexicana los favoritos normalmente son los deliciosos tacos al pastor, de bistec y sus variantes que incluso fusionan platillos entre sí y se les dan otros nombres. Por ejemplo, en una taquería encontramos las gringas, volcanes, las lecheras y otras preparaciones que usan la carne, tortillas, queso con diferentes condimentos.
Otro clásico que encontramos en los puestos de comida callejera son las quesadillas. Este platillo preparado se trata de una tortilla doblada que en casi todos los estados de México se incluye esencialmente el queso y de forma opcional un guisado, con excepción del área metropolitana, que puede prescindir del queso.
A partir de esta variante existe un debate sobre si las quesadillas deben llevar o no queso y las posiciones y argumentos son cada vez más fuertes. Esta situación parece ser no muy importante, pero si eres de una provincia y acudes a una de las taquizas para eventos en CDMX deberás indicar que tu quesadilla con carne lleve queso, algo que puede molestar o confundir a más de uno.
Es por eso que el día de hoy comentaremos un poco sobre el debate milenario, quesadillas: con o sin queso. Si quieres conocer más sobre la historia que originó este debate y cuáles son los argumentos de cada posición, sigue leyendo.
¿Qué significa “quesadilla”?
Desde que el debate se trasladó a las redes sociales, cualquier persona puede emitir y replicar ideas respecto al tema y no siempre se comparte información comprobada. Por ejemplo, hace un tiempo circuló por internet que la palabra “quesadilla” viene del vocablo náhuatl quetzaditzin, que significa “tortilla doblada”, sin embargo, ningún diccionario oficial de la lengua afirma esta información.
Posteriormente se compartió que en realidad venía de la palabra española “quesada”, un tipo de pastel hecho de queso y masa. Se le agrega el sufijo “illo” para marcar su pequeño tamaño, y es a partir de ella que el platillo que conocemos actualmente toma su nombre.
Lo que dice la RAE
Ahora, la RAE, que es la institución regularizadora lingüística del mundo hispanohablante, decidió responder a esta interrogante con su definición. La quesadilla es una tortilla elaborada con masa de maíz o harina de trigo que se sirve doblada y caliente, ya sea en el comal o frita.
Parece que con esta acepción se concilia cualquier desacuerdo, sin embargo, muchas personas aún no están conformes y siguen el debate desde distintos puntos de partida.
¿Quesadillas sin queso o tacos?
Uno de los pensamientos que se tienen contra la idea de que las quesadillas pueden llevar o no queso es que, si fuera de esta forma, podría considerarse un taco tal como conocemos los tacos de trompo al pastor o de guisados y deja de ser una quesadilla.
Es verdad que existen muchas variantes que pueden crearse tan sólo con masa de maíz y queso. Por ejemplo, en la zona de Baja California los platillos de dos tortillas calientes con queso y jamón entre ellas son quesadillas, mientras que esta preparación en el resto del país es una “sincronizada”.
Algo similar ocurre al sur, en las ciudades de la costa donde hacen quesadillas hechas con tortillas, queso y pescado. A estas preparaciones se les conoce como “pescadillas“ por su uso de carne de peces y otros animales marinos.
Origen de las quesadillas
Como te platicamos más arriba, la palabra “quesadilla” proviene de un vocablo español y el mismo platillo ha ido evolucionando de acuerdo a su introducción en México. Esto era inevitable que sucediera, la creación de variables era imposible frenar. Incluso ahora encontramos ejemplos como las “dinoquesadillas”, ¿las has probado?
El lingüista José G. Moreno de Alba menciona que la palabra ha tomado distintos sentidos con el paso del tiempo, su evolución ha permitido que en ciertos lugares ese platillo no lleve necesariamente queso, sino otro tipo de relleno.
Este fenómeno lingüístico lo podemos reconocer en muchas palabras e incluso en otros platillos. Al final, las quesadillas son platillos tan versátiles que incluso encontramos hasta 10 formas diferentes de prepararlas y cambian de acuerdo al lugar donde las cocinan.
Las podemos reconocer fritas, al comal, con queso, sin queso, con relleno de papa, gigantes, en forma de dinosaurio y hasta banqueteras. Cuéntanos cuáles has probado tú y cuál es tu variable favorita en los comentarios.
Esto fue todo por nuestra parte, aquí conocimos que este ha sido uno de los debates más escuchados desde hace años por ser tan íntimo en nuestras tradiciones y que toma más peso al ser un punto de choque entre los propios mexicanos.
Pese a esto es un gran tema de conversación donde podemos sacar nuestros mejores argumentos y encontrar un espacio de conciliación entre ideas. Así que esperamos que este artículo sea de ayuda y hayas encontrado información que tal vez anteriormente no habías visto.Sigue nuestro contenido para conocer más sobre todo lo que te puede ofrecer una taquiza para eventos, datos curiosos sobre tacos al pastor y más. ¡Hasta la próxima!
